martes, septiembre 19, 2006

El cuento del Oso y la Campesina

¿Os acordáis de los cuentos que leíamos cuando éramos pequeños? La Caperucita Roja, La Bella Durmiente, Los Tres Cerditos, El Cuento del Pastorcillo. Seguramente muchos os dormisteis con la voz de vuestros padres contandoos uno de esos cuentos. Hoy quiero contaros yo uno de cosecha propia. Espero que algún día se lo pueda contar a mis hijos.

El Oso y la Campesina

Érase una vez una campesina que vivía en un pueblo en medio del bosque. El pueblo era muy muy pequeño y además no vivía nadie más que aquella campesina. Cuando era una niña la dejaron abandonada en aquel pueblo cuando todos huyeron espantados por la supuesta presencia de un monstruo.

La pobre campesina aprendió a valerse por si misma y ella era quien cultivaba sus hortalizas, cazaba sus animales y pescaba sus pescados. Un día estando de caza, con su arco y sus flechas, se encontró con la sombra de un animal enorme. Al principio se asustó pero luego se armó de valor y fue hacia la sombra. Escondiéndose sigilosamente detrás de los árboles se acercó hasta la sombra. Allí encontró un oso de descomunales dimensiones.

La campesina saltó de su escondite apuntando con su arco al oso que salió corriendo despavorido y ella corrió detrás de él para intentar darle caza. La persecución terminó cuando el oso se escondió en una cueva oscura. La campesina tenía miedo de entrar porque estaba a oscuras así que encendió una antorcha y se metió en la cueva. Con mucho miedo iba dando pequeños pasos y observando cada rincón de la cueva. Tras caminar varios minutos en un rincón encontró al gran animal acurrucado y temblando de miedo. Ella tiró la antorcha al suelo y sacó el arco y lo tensó cuando el oso le dijo:

- ¡No me hagas daño!

Sorprendida la campesina le dijo:

- ¡Sabes hablar!
- Sí, no soy lo que parece. Hace muchos años un mago malvado pasó por el pueblo en el que vives y me convirtió en lo que ves. Todo el mundo huyó del pueblo y supongo que a ti te dejaron olvidada.

Tras oir esto la campesina sintió mucha pena por el pobre monstruo en que le habían convertido. En una de sus excursiones había visto una casa muy extraña que resultó ser de una bruja. Decidió ir a visitarla y contarle lo que había visto y lo que le había contado el oso.

Una vez allí la bruja le contó que sí, que sabía quién había sido, un brujo de magia negra. También le contó que aquello tenía vuelta atrás y que sólo tenía que llevarlo al río meterlo hasta el cuello y salpicarle con agua tres veces. Una vez hecho esto tendría que darle un beso y el hechizo desaparecería.

La campesina fue hacia la cueva a contarle al oso lo que la bruja le había contado. Él accedio ya que no tenía nada que perder y mucho que ganar.

Se fueron al río y él se metió en el río como había dicho la bruja y ella con las manos le salpicó tres veces la cabeza con agua. Después el oso salió y ella se acercó y le besó. Un resplandor cegador surgió de donde se encontraban. Al desaparecer la luz la campesina se encontró con un apuesto joven del que se quedó enamorada.

Los dos vivieron juntos en el pueblo y fueron felices y comieron perdices.

Buenas noches. Que sueñen cosas bonitas.

3 comentarios:

Alberto Fernández dijo...

Mi sobrino te lo va agradecer, jajajajaj, pero sus padres más si eres capaz de que se quede dormidito con este cuento.
Que recuerdos, meterme en cama y que mi madre o mi padre me leyesen un cuento. Y como recuerdo luego volver a encender la luz y leerme yo otro a escondidas, jajajajajajajajaj.
Por cierto, ummmmmm, un oso, una jovencita muy guapa, un oso que luego resulta ser un atractivo varón, sé que soy mal pensado, pero me juego algo que aquí hay mensaje encriptdo, jajaja.

Un saludo y a recuperar los cuentos, y sobre todo, tu creatividad que se hechaba de menos.

Anónimo dijo...

¡Qué bonito cuento! Siempre me ha encantado que me cuenten historias y sobre todo si acaban bien como ésta, ahora, no hay nada como que una persona especial te las cuente al oído solo para ti y dejar volar la imaginación, lo digo por experiencia ;).
Te quiero, besitos.

Anónimo dijo...

k bonito cuento!! ya hacia tiempo que no me pasaba por aki, asik m encontre con una bonita sorpresa, pena que no lo escribieses antes, pork lo abria aprovechado para algun trabajo..
jaja
a pasalo ben, un beso.